Iñaki Gutiérrez y Las Fuerzas Del Cielo sanjuaninas: una crónica desde adentro de la militancia libertaria

“Nosotros defendemos las ideas de la libertad, lo importante es la batalla cultural sobre la idea”, dice uno de los tantos de allí que viste remera bordó. Es el uniforme distintivo de Las Fuerzas Del Cielo, la organización de jóvenes libertarios que militan en San Juan y que ahora se reúnen en la entrada del hotel Syrah para esperar a Iñaki Gutiérrez.

¿Quién es Iñaki Gutiérrez? Fue clave en el manejo de redes sociales de Javier Milei para llegar a Casa Rosada. Ahora lo acompaña en sus viajes por el país de cara a las elecciones de octubre.

El sol de la siesta hace pesado el ambiente. A pesar de ello, Las Fuerzas Del Cielo saltan y entonan viejas canciones que recuerdan al peronismo, pero reversionadas a modo de contestación: “Abran paso, llegó Javier Milei / pongan huevos, la casta va a correr”. Más tarde se escuchará “saquen al pingüino del cajón para que vea que este pueblo cambió de ideas lleva las banderas de javo el león”.

Cantando, la juventud sube las escaleras al primer piso, donde unas cien personas esperan en sus asientos la llegada del influencer libertario. Son muy pocas las mujeres, todos ellos visten de violeta. Hay una tarima, una pantalla detrás con las caras de Javier Milei e Iñaki. En una mesa, al lado del escenario, hay cuatro o cinco jarras de agua fresca, pero para tomar de ellas hay que pedirle vasos a Las Fuerzas Del Cielo.

“Tengo 29 años y estoy todo el tiempo en las redes batallando, intentando inspirar, despertar conciencia, sabiendo que el socialismo es intrínsecamente perverso”, comenta Cristian González. En la espalda lleva una ilustración de San Jorge, mártir de la Iglesia Católica. ¿Sabrán los jóvenes libertarios que la Justicia Social no la inventó Perón sino la Iglesia cincuenta años antes?

«Soy académico autodidacta. No tengo título, pero sí bastante formación en historia, política, economía, filosofía. Estuve en la facultad, pero lamentablemente tuve que dejar porque estaba muy infectada de ideologías que no coordinaban con mi pensamiento» sentencia Cristian.

En eso sube las escaleras Iñaki y es aplaudido por todos. Arrancan las exposiciones. El primero es un tal Federico Ceballos, tiene el cierre del pantalón abierto y el saco mal abrochado. Es ex estudiante de abogacía en la UNSJ y ahora está en la Universidad Católica de Cuyo. Habla relajado, caminando de un lado a otro. Lo suyo parece más un coach motivacional, una ted talk que inaugura el evento.

Le sigue el presidente de Las Fuerzas Del Cielo en San Juan, Mahor Caparrós. En sus palabras, es comerciante independiente hace ya diez años. Micrófono en mano, pregunta: “¿Ustedes creen que la Argentina se cambia con los votos? La verdadera batalla se libra en las mentes y en los corazones de las personas, no en las urnas”.

Nos hicieron creer que existía el Estado de Bienestar, que debía estar presente en nuestras vidas. Lo hemos aceptado, antes de tomar conciencia. Cuando llegó el león nos dimos cuenta que algo en nuestras mentes estaba mal.

Se movía igual que su antecesor en el pequeño escenario, como si los dos hubieran practicado juntos cómo hablar frente al público. “Ellos se metieron en las universidades, en las escuelas, en los medios, en canciones, en memes”. Dice “Ellos” repetidamente, como si temiese que al decir la palabra ausente se materializara en el salón una movilización de la CGT.

¿Qué es una batalla cultural? “Ni idea, no estoy entendiendo mucho”, responde Nico. Tiene 20 años y es uno de los pocos jóvenes -verdaderamente jóvenes- que está allí. Detrás de toda la gente, en el balcón, el único lugar por donde entra una corriente de aire, hay cinco pibes conversando, el más chico tiene 17, el más grande 22. “Algunas cosas están bien, otras le falta” dice con indiferencia antes que se acerque un tipo con una gorra violeta a cortar la conversación.

Y finalmente llega el turno de Iñaki, “para lo que vinimos todos” dice el presentador sabiendo que después de él hablarían los candidatos a diputados. Abel Chiconi, Cristina Tejada y Gabriel Sancassani esperan al lado del escenario, saludando a la gente.

La estrategia de proponer un candidato desconocido para la gente no estaría funcionando. Hace unos meses, el diputado de La Libertad Avanza, José Peluc, había dicho que “el elegido sería alguien tan liviano que el viento de Milei podría levantarlo como a una pluma”. Lo que no tuvo en cuenta es que ese mismo viento también podía arrastrarlo hacia la derrota.

La única verdad es la realidad. La Libertad Avanza gobierna de forma improvisada y en los últimos meses su desempeño estuvo marcado por la crisis económica y política. Mientras las principales figuras del gobierno están enredadas en causas judiciales por corrupción, estafa, y vínculos con el narcotráfico, la respuesta de los libertarios sanjuaninos es llana y orgánica: «no podemos hablarte de eso«.

/// Leé también: La trama Machado: los vínculos de Espert con el empresario acusado de narcotráfico

Las últimas elecciones, en Corrientes y Buenos Aires, no salieron bien para La Libertad Avanza. En San Juan las encuestas lo ubican en un tercer puesto, muy por detrás del peronismo y el orreguismo. Cristian González responde que “en la filosofía hay tres puntos de vista: el realismo, el pesimismo y el optimismo. Nosotros somos optimistas”.

Iñaki Gutiérrez toma el micrófono para exaltar que Javier Milei sacó a millones de personas de la pobreza. Y arenga también a su tropa «no nos vamos a dejar correr por un grupo de inadaptados que salta mientras ve a una condenada en un balcón que no puede salir de su casa».

/// Leé también: Encuesta en San Juan: el orreguismo y el peronismo se polarizan y La Libertad Avanza se desploma

La muñeca pepona, como le dicen en redes sociales, cierra el evento diciendo “a los kirchneristas no tenemos nada que responderles, porque no dialogamos con asesinos, no dialogamos con pedófilos, no dialogamos con violadores, con todo lo que representa el kirchnerismo”.