Quién será el nuevo Fiscal General: las tensiones políticas detrás de Baigorrí, Lozano y Senatore

Tras semanas de rosca y tensiones, el nombre que surja del recinto marcará el nuevo mapa de poder dentro del Ministerio Público. Quién apoya a cada uno.

En la recta final para definir al sucesor de Eduardo “Jimmy” Quattropani como Fiscal General de San Juan, quedaron solo tres nombres en carrera. La terna, que ahora deberá votarse en la Legislatura provincial, está integrada por Guillermo Baigorrí, Rolando Lozano y Matías Senatore.

El fiscal general de la Corte de Justicia de San Juan, Eduardo Quattropani, falleció el 21 de julio de 2025. Murió a los 77 años tras una prolongada enfermedad que lo había mantenido alejado de sus funciones durante varios meses.

El Consejo de la Magistratura definió el martes 14 de octubre la nómina en una sesión que duró menos de una hora. El cargo está vacante desde el fallecimiento de Quattropani, el 21 de julio. Había ocupado ese puesto durante 32 años, desde su designación en 1993.

Es importante recordar que el Consejo de la Magistratura está compuesto por cinco miembros que representan distintos sectores: Juan José Victoria, por la Corte de Justicia; Laura Palma, por el Ejecutivo; Fernanda Paredes, por el Legislativo; y Valeria Torres y Raúl Acosta, por la abogacía libre.

Integrantes del Consejo de la Magistratura

El proceso para definir la terna fue tenso. Muy tenso. Estuvo atravesado por disputas políticas, intereses cruzados y negociaciones de último momento. La división interna dentro del Consejo marcó todo el debate. Por eso, la terna final no fue producto de un consenso generalizado, salvo por la postulación de Lozano, que sí salió por unanimidad. En cambio, las de Baigorrí y Senatore fueron votadas con diferencias.

La inclusión de Baigorrí —camarista laboral con pasado en el partido Producción y Trabajo, el espacio del actual oficialismo liderado por Marcelo Orrego— fue el principal punto de conflicto. Era el preferido de la Casa de Gobierno y el oficialismo lo quería en la lista. Pero no fue fácil. En el debate final, algunos miembros del Consejo pusieron reparos. El oficialismo logró incluirlo a fuerza de negociaciones, idas y vueltas, y bastante muñeca política, alcanzando al menos tres de los cinco votos necesarios.

//Leé nuestra nota anterior: Recta final en la elección del próximo Fiscal General: candidatos clave y la pulseada política entre orreguistas y uñaquistas

La tensión también se hizo sentir en el peronismo. Dentro del Consejo, el sector opositor —con peso aún en el organismo— había acordado no convalidar a Baigorrí. Sin embargo, Valeria Torres, representante de la abogacía y cercana al PJ, votó a favor del camarista. La decisión desató críticas internas: dirigentes peronistas reprocharon que “hizo lo que quiso”, en alusión a una ruptura con la línea de voto acordada.

El proceso fue largo y lleno de tropiezos. El Consejo tuvo al menos dos reuniones fallidas antes de cerrar la terna. Hubo idas, vueltas y mucha especulación. Algunos creían que la definición se postergaría hasta después de las elecciones del 26 de octubre, para evitar ruido en la campaña. Pero no. El 14 de octubre se reunieron y resolvieron todo en menos de una hora.

Consejo de la Magistratura. De izquierda a derecha: Valeria Torres, Fernanda Paredes, Juan José Victoria, Raúl Acosta y Laura Palma.

La sorpresa fue la inclusión de Matías Senatore, definido como un hombre de “consenso”. Su nombre apareció en las negociaciones de último momento y muchos lo veían como un “plan B” en caso de que Baigorrí generara resistencia en la Legislatura.

Ahora, la decisión final está en manos de los diputados.

Cómo viene el “poroteo” en la Legislatura

La definición del nuevo Fiscal General está ahora en manos de la Cámara de Diputados. Y los números favorecen al oficialismo provincial, que busca imponer a su candidato, Guillermo Baigorrí, con pasado político en Producción y Trabajo, el espacio del gobernador Marcelo Orrego.

El orreguismo cuenta con mayoría propia y aliados sólidos. Tiene los 12 votos de Producción y Trabajo, los cuatro del Bloquismo y el del angaquero Marcelo Mallea. Podría sumar, además, apoyos esporádicos de exintendentes justicialistas como Jorge Castañeda y Omar Ortiz.

En duda está el libertario Fernando Patinella, mientras que Franco Aranda, que hasta hace poco votaba junto al oficialismo, volvió al Frente Fuerza San Juan del peronismo. Por eso, difícilmente acompañe esta vez al gobierno.

La Legislatura tiene una composición inédita: el oficialismo no tiene mayoría, aunque si logra los apoyos necesarios puede imponerse.

En definitiva, todo indica que el oficialismo logró incluir a Baigorrí en la terna sabiendo que cuenta con los votos para elegirlo.

El peronismo, aunque sigue siendo el bloque más numeroso, perdió fuerza y aliados. Las divisiones internas le costaron varias votaciones. Desde el uñaquismo adelantaron que impulsarán a Rolando Lozano, a quien consideran el más preparado por su conocimiento del Ministerio Público.

Para que el orreguismo imponga a Baigorrí necesita 19 votos. Tiene 17 asegurados. El resto dependerá de su poder de persuasión.

Por ahora no hay fecha definida para la votación en Diputados, aunque se resolvió que el debate será después de las elecciones del 26 de octubre.

El perfil de los ternados

Guillermo Francisco Baigorrí es camarista laboral y figura del oficialismo provincial. Actualmente se desempeña como juez de la Cámara de Apelaciones del Trabajo, cargo que ocupa desde diciembre de 2012. También integró la Sala Segunda de la Corte de Justicia de San Juan como juez subrogante, y participó activamente en la llamada “Megacausa de Expropiaciones”.

Guillermo Baigorrí

Ejerció la abogacía durante más de dos décadas, desde 1989 hasta 2012, asesorando a empresas y litigando en el fuero laboral. Se recibió de abogado en la Universidad de Buenos Aires (UBA) y fue profesor de Derecho Constitucional en la Universidad Católica de Cuyo entre 1990 y 2004. Desde 2001 dirige interinamente la misma cátedra en la Universidad Nacional de San Juan.

Además de su carrera judicial, Baigorrí tiene un fuerte pasado político, lo que genera resistencia en la oposición. Fue diputado nacional entre 2003 y 2007 y llegó a ser electo senador, aunque renunció antes de asumir. También presidió el partido Producción y Trabajo, el espacio del gobernador Marcelo Orrego, por lo que en el ámbito político lo señalan como “el preferido de la Casa de Gobierno” y un “soldado fiel” del oficialismo.

El segundo en la lista es Rolando Aníbal Lozano, funcionario judicial de carrera y especialista en Derecho Penal. Dentro del Poder Judicial lo reconocen como un hombre clave en el funcionamiento del Ministerio Público Fiscal. Goza de consenso político y judicial.

Rolando Lozano

Desde 2018 es secretario relator de la Fiscalía General y fue uno de los colaboradores más cercanos del fallecido Eduardo Quattropani. Además, supervisa tres Unidades Fiscales de Investigación, entre ellas la Cavig (Violencia Intrafamiliar y de Género) y la de Delitos contra la Propiedad.

Fue miembro titular del Consejo de la Magistratura (2011-2014) y asesor del área penal del gremio UTA San Juan durante casi dos décadas. Es abogado por la Universidad Católica de Cuyo (1997), tiene un máster en Derecho Penal Internacional (Universidad de Granada, 2018) y un diplomado en Oralidad (2018-2019).

Su nombre fue el único que recibió el voto unánime de los cinco miembros del Consejo. La Corte de Justicia también avala su perfil. En el uñaquismo destacan su conocimiento del Ministerio Público y aseguran que acompañarán su candidatura en la Legislatura.

El tercero en la terna es Matías Rogelio Senatore Pasten, el llamado “tapado”. Es un abogado especializado en gestión judicial y modernización del sistema, con reconocimiento por su rol en el diseño e implementación del sistema acusatorio.

Matías Senatore

Actualmente es coordinador administrativo de la Oficina Judicial Penal (Ofijup) del Poder Judicial de San Juan, cargo que ocupa desde 2021. Antes fue director de la Oficina de Gestión de Audiencias (OGA) del sistema de Flagrancia entre 2016 y 2020, donde impulsó reformas organizacionales que le valieron el Premio Nacional a la Calidad en la Justicia.

También fue secretario relator de la Corte de Justicia y, antes de ingresar al Poder Judicial, trabajó como apoderado de la Casa de Chile, oficina de integración de la Región de Coquimbo en San Juan. Se recibió de abogado y procurador en la Universidad Nacional de Córdoba en 2005.

Su postulación fue aprobada por votación dividida. Lo describen como un profesional del “consenso”. Ingresó a las negociaciones en los días previos a la definición y muchos lo consideraban un “plan B” si Baigorrí enfrentaba resistencia en Diputados.

Un dato de color: juega al pádel con Orrego.

Scroll to top
Close