Los candidatos sanjuaninos pelean por sus intereses en medio de un voto nacionalizado
En estas Elecciones Generales, todas las luces apuntan a los candidatos presidenciables y, por consecuencia, los electores votan pensando en lo nacional. Sin embargo, Unión por la Patria, Juntos por el Cambio y La Libertad Avanza se juegan sus intereses particulares.
La nacionalización de las Elecciones Generales en la Argentina es un hecho. El 90% de los electores vota solo pensando en figura presidencial, que en este caso se disputa principalmente entre Javier Milei, de La Libertad Avanza; Sergio Massa, de Unión por la Patria; y Patricia Bullrich, de Juntos por el Cambio.
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En San Juan, solo las listas locales de los presidenciables nombrados anteriormente lograron pasar las PASO. Con esta perspectiva nacionalizada, cada candidato se juega sus propios intereses. Para el gobernador y candidato a senador, Sergio Uñac, ganar significa seguir en el rodaje con un cargo, además de mantener su liderazgo en el Partido Justicialista local.
Para el gobernador electo, Marcelo Orrego, representa tener a sus dos cabeza de lista, Emilio Achem y Nancy Picón, en la cámara alta y baja de la Nación. Según manifestaron en toda su campaña, serían los “brazos de Orrego” pidiendo por beneficios para San Juan. Finalmente, para los candidatos libertarios, Bruno Olivera y José Peluc, supone construir una red política que, hoy por hoy, el sector libertario no tiene.
Desde hace tiempo que una elección no era tan ajustada como en este 2023. El escenario de tercios, donde los tres máximos candidatos rondaron aproximadamente el 30%, hace prácticamente imposible prever los resultados. La segunda vuelta parecería casi inevitable, puesto que sería difícil que alguno de los presidenciables suba 15 puntos desde los resultados de las PASO (aunque todo puede pasar). A este contexto tuvieron que limitarse los candidatos locales. Atados de pies y manos, delimitaron una campaña completamente ajustada a lo que hacían sus referentes nacionales, aun teniendo en cuenta que tienen mucho que perder y mucho que ganar.
Luego de dirimir la interna en las PASO con el giojismo, Uñac se convirtió en la cabeza de lista de los candidatos a senadores de Massa, seculado por la camporista Celeste Giménez. En el caso de diputados, el primer aspirante es el actual secretario de Deportes de la provincia, Jorge “Coqui” Chica y, en segundo término, la bloquista Melisa Naveda. Por parlamentario al Mercosur compite Matías Sotomayor.
La militancia de este sector se orientó hacia la Mesa Massa Presidente, donde hubo cierta “unidad” para trabajar por el presidenciable. Sin embargo, las candidaturas locales no quedaron de lado. Quizá el candidato que se juega más es Uñac, que se quedó sin competir como gobernador luego del histórico fallo de la Corte Suprema de Justicia, que inhabilitó su candidatura. En medio de una interna feroz, el justicialismo perdió la provincia después de 20 años de gobierno y la carta del Senado es la única que le asegura al actual gobernador continuar en el rodaje con un cargo. En este sentido, se pelea la posibilidad de liderar el peronismo de cara a lo que ellos mismos llamaron, la recuperación de San Juan en el 2027.
La otra lista que competirá localmente es la de Juntos por el Cambio, encabezada por Achem en el senado y Picón en la diputación, mientras que por parlamentaria del Mercosur la candidata es Claudia Sarmiento. La situación de estos aspirantes es particular, puesto que forman parte del riñón del gobernador electo Orrego. Lo cierto es que, como la actual diputada nacional Susana Laciar, de Producción y Trabajo, asume como intendenta de Capital, el orreguismo se quedaría sin representación en la Cámara Baja, puesto que en su lugar asume Alejandra Leonardi, de la UCR. De este modo, la campaña de JxC se basó prácticamente en pedirle a los sanjuaninos que elijan a personas de la confianza del primer mandatario provincial, para que gestionen obras en pos del plan que generaron para San Juan.
El interés principal es ese, seguir teniendo gente del entorno de Orrego en Nación para gestionar “lo que San Juan necesite” o, al menos, ese es el pedido: “Acompañanos como lo hiciste el 2 de julio”. El problema es que el aspirante a senador o diputado es una simple figura de reparto en esta elección y la gente ya votó gobernador.
Los que menos se juegan en estos comicios son los aspirantes de LLA, Olivera como senador, Peluc como diputado y Lucía González como parlamentaria del Mercosur. Tal vez, son los que más fácil la tuvieron en cuanto a campaña, simplemente replicaron las propuestas de Milei y recibieron su arrastre de votos. Pero también es cierto que, mientras más legisladores le aporten a un potencial gobierno de Milei, más sólido sería en cuanto a gobernabilidad. Es que una de las mayores críticas al sector es que carecen de mayoría en las cámaras (no solo no tienen mayoría, sino que no llegan ni al tercio en legisladores) y tampoco tienen gobernadores, por lo que les sería muy complicado aplicar medidas de gobierno.
De esta manera, los candidatos locales de UxP, JxC y LLA intentarán sostener sus intereses en un contexto que se les escapa de las manos y en el que saben que los resultados no dependen de ellos.
Qué podría pasar
San Juan renovará las tres bancas del Senado, ocupadas actualmente por los justicialistas Rubén Uñac y Cristina López de Abarca y Roberto Basualdo, de JxC. Por su parte, en Diputados también sustituyen tres lugares: por UxP, el de José Luis Gioja y Graciela Caselles y, por la oposición, el de Orrego.
En la Cámara Alta, los senadores se distribuyen dos para la lista con más votos y uno por la segunda más votada. Teniendo en cuenta que en las PASO, LLA ganó por más del 30% de los votos y que UxP obtuvo el segundo lugar, ingresarían dos legisladores libertarios y uno de la coalición peronista.
El caso de la Cámara de Diputados es más complejo, debido a que se define por el sistema D’Hondt. Este sistema excluye las listas que no llegaron al 3% y divide los votos por la cantidad de bancas en juego, tres en este caso. Por ejemplo, dado que se reparten los lugares en tres partidos, si la lista A obtiene 5.000 votos; la B, 3.000 y la C, 2.000, se deberá dividir ese número por 1, 2 y 3 (el número de cargos a cubrir en el Congreso).
Después, se colocan los resultados de las divisiones de mayor a menor y se van asignando los cargos.
En este marco, si todo sigue más o menos igual que en las PASO y los resultados continúan en tres tercios, a la Cámara Baja ingresaría un legislador de cada lista.
En el caso de Parlamentario del Mercosur, la cuenta es más fácil, puesto que ingresa el candidato más votado. En los comicios anteriores la más votada fue la libertaria González.