El ómnibus de los lamentos

La Ley Bases vuelve a foja cero. Revés para el oficialismo en la Cámara de Diputados. Idas y vueltas, fuertes acusaciones de traición y un futuro incierto.

La semana pasada, la Ley de “Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos” había sido aprobada en general en Diputados y desde el Gobierno esperaban que corriera igual suerte en la votación particular del martes. No fue así. El oficialismo no recibió el respaldo de los bloques –ingenuamente o no, contaba con ese apoyo- para aprobar los artículos considerados clave, solicitó un cuarto intermedio con los jefes de bloques y, finalmente, decidió levantar la sesión y devolver la iniciativa a la comisión legislativa. La torpeza, arrogancia e impericia a la hora de negociar con los distintos actores fue determinante para el revés político.

Si en la nota de La Mecha del pasado domingo titulada “Una ley para gobernarlos a todos” habíamos dicho que la aprobación de la Ley Ómnibus en general había sido una victoria del gobierno de Javier Milei, esta es claramente una derrota. De igual modo, las batallas continuarán.

Ahora, el paquete de reformas volverá a foja cero, retornará a las comisiones de la Cámara baja. Allí los distintos espacios tendrán que debatir el texto con los cambios que fueron acordados.

Según el Artículo 155 del Reglamento de la Cámara de Diputados, “un proyecto que, después de sancionado en general, o en general y parcialmente en particular, vuelve a comisión, al considerarlo nuevamente la Cámara, se le someterá al trámite ordinario como si no hubiese recibido sanción alguna”.

Guillermo Francos, el responsable del Poder Ejecutivo de negociar con los gobernadores y diputados dialoguistas.

Traduciendo: La Ley Ómnibus, cuya aprobación general del pasado 2 de febrero quedó sin validez, será sometida otra vez a debate en un plenario de comisiones –Legislación General, Presupuesto y Hacienda, y Asuntos Constitucionales– y una vez que obtenga un nuevo dictamen podrá ser convocada una nueva sesión para que los diputados vuelvan a debatir el tratamiento general. Para eso, el Poder Ejecutivo deberá ampliar nuevamente el periodo de debate que estaba estipulado hasta el 15 de febrero. De igual modo, en las últimas horas circuló el rumor de que Milei estaría analizando la posibilidad de hacer una consulta popular.

El troll center del Presidente, a la orden del día

En este país se aburre el que quiere”. La cita célebre de Twitter bien podría aplicarse a esta situación atípica que se está viviendo en materia política en nuestro país.

Para darle más condimento a lo sucedido, desde las redes sociales de La Oficina del Presidente publicaron un surrealista comunicado donde destacaron “la traición a sus votantes por parte de todos los bloques que le dieron la espalda a sus promesas de campaña por una Argentina distinta” y mencionan, uno por uno, a los diputados que no apoyaron la votación particular.

“El pueblo jamás olvidará los nombres de aquellos que, pudiendo facilitar las reformas que fueron elegidas por el 56% de los argentinos, decidieron seguir haciéndole el juego a la casta”, agregaron. Algo que tranquilamente podría haber publicado un troll de esos que tan acostumbrados nos tienen a entretenernos en las redes.

Desde la cuenta oficial de La Libertad Avanza (LLA), también indicaron que “La traición se paga cara” y que no van a “permitir que los gobernadores extorsionen al pueblo para mantener sus privilegios”. Y desde la cuenta personal del mismo Presidente –que se encuentra en Israel en una visita diplomática-, se reposteó un hilo con “los nombres y caras de los diputados traidores y extorsionadores del pueblo argentino”. Insólito por donde se lo mire.

El oficialismo apuntó contra los gobernadores “dialoguistas”

“Los gobernadores tomaron la decisión de destruir la Ley Bases y Puntos para la Libertad de los Argentinos artículo por artículo, horas después de acordar acompañarla. Decidieron darle la espalda a los argentinos para proteger sus intereses e impedir que el Gobierno Nacional cuente con las herramientas para resolver los problemas estructurales de la Argentina”, indicó el comunicado del oficialismo instantes después de conocerse que la Ley volvía a comisiones.

Horas más tarde desde Israel, Milei calificó de “delincuentes” a los legisladores que quisieron modificar su Ley Bases, además de apuntar que los gobernadores intentaron sabotearlo.

Si bien los que votan en la Legislatura son los diputados, no se puede negar que estos últimos están atados a acuerdos y negociaciones macro con los gobernadores. Durante las últimas semanas, varios de ellos –Jorge Macri (jefe de Gobierno porteño), Nacho Torres (Chubut), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Leandro Zdero (Chaco), Gustavo Valdés (Corrientes) y Martín Llaryora (Córdoba), Marcelo Orrego (San Juan), entre otros- mantuvieron reuniones tanto con el ministro del Interior, Guillermo Francos, como con los diputados de los bloques dialoguistas –UCR, PRO, Hacemos Coalición Federal, Innovación-.

El que hizo su jugada más arriesgada fue el cordobés Llaryora. Hizo que Caputo diera marcha atrás con su capítulo fiscal. Presionó hasta último momento para conseguir mejoras en algunas cuestiones de la Ley Ómnibus, dio su aprobación –en realidad a sus diputados y también al resto de gobernadores dialoguistas encolumnados- en general pero, tras no lograr acuerdos en otros puntos clave de la Ley, fue apuntado desde Casa Rosada como uno de los gestores de la “traición”. Hay quienes dicen –el senador cordobés Luis Juez, por ejemplo– que de esta manera el ex intendente de San Francisco y de Córdoba Capital empezó su campaña presidencial para el 2027.

La principal preocupación de los gobernadores dialoguistas pasaba por evitar que el Gobierno tenga facultades para modificar o eliminar fideicomisos o fondos fiduciarios públicos que impacten directamente en las provincias. Además, las autoridades nacionales y las provincias no llegaron a un acuerdo por la coparticipación del impuesto PAIS y las privatizaciones.

Massot, Pichetto y Randazzo durante el debate de La Ley Ómnibus.

Por eso, en la votación particular, se cayeron varias de las facultades delegadas que el oficialismo pretendía obtener. Este fue el punto clave por el cual se decidió levantar la sesión y volver a foja cero.

En el listado de diputados –publicada en la cuenta de X de la Oficina del Presidente– que votaron “a favor del pueblo”, aparece el sanjuanino José Peluc, de LLA, mientras que en los que lo hicieron “en contra del pueblo” mencionan a las legisladoras orreguistas María de los Ángeles Moreno y Nancy Picón, a pesar de que ambas votaron todo a favor. Obviamente a los de Unión por la Patria –Walberto Allende, José Chica y Fabiola Aubone– ni los citan.

Nancy Picón y María de los Ángeles Moreno, las dos diputadas nacionales orreguistas en el Congreso que dieron sus votos a favor de la Ley Ómnibus.

Hasta el momento la relación entre Orrego y Milei venía bien, al menos cordial y amena. Pero el señalamiento a sus diputadas como “traidoras” y la sensación de “sed de venganza” quizás marquen un antes y un después en este vínculo, aunque ellas no votaron en contra. De hecho, tenían la orden de Orrego de votar todo a favor porque ya tenían todo arreglado. Cuando llega el momento de votar los artículos particulares y los diputados radicales empezaron a votar en contra de todo, Picón y Moreno quedaron ligadas a esa situación y fueron señaladas como traidoras.

Sobre esto, el gobernador Orrego publicó en sus redes sociales lo siguiente:

Lógico, el gobernador sanjuanino está atado a lo que puedan hacer el resto de los mandatarios provinciales “dialoguistas”, que gozan de mayor poder de negociación. Habrá que ver si el diálogo continúa, y cómo.

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