Comedor Universitario Juan Gutiérrez: una promesa que lleva 8 años en espera
La obra del edificio inició en 2013 y en ese momento se estimaba inaugurarlo en 2014. Hoy, los y las comensales son alrededor de 400 y continúan utilizando el subsuelo de la Facultad de Exactas, un espacio habilitado para aproximadamente 70 personas.
El viernes 1 de marzo de 2013, en el Complejo Universitario Islas Malvinas (CUIM), se realizó un acto en el que se colocó la primera piedra de la construcción del aquel entonces nuevo comedor de la Universidad.
La obra tendría aproximadamente 1700 metros cuadrados cubiertos e iba a ser construida por la empresa Copisa S.R.L. Estaba valuada, en ese momento, en 4 millones y medio de pesos. El capital fue otorgado por fondos mineros provenientes de Yacimientos Mineros de Agua de Dionisio (YMAD). Esta empresa catamarqueña, se creó en la década del 60 bajo la Ley 14.771, la cual estipula que un porcentaje de las ganancias sería destinada a la formación de un fondo nacional para universidades del Estado.
En ese momento, se estimaba que la obra iba a concluir entre julio y agosto de 2014, según una nota periodística publicada en Tiempo de San Juan. Sin embargo, el 9 de octubre de 2014 fue inaugurada únicamente la primera etapa del comedor en el marco de un acto que contó con la participación del Gobernador José Luis Gioja, el Rector Oscar Nasisi, el Secretario de Obras Jorge Cocinero, entre otras autoridades de ese entonces. Respecto a la segunda etapa de la obra, que correspondía a las áreas de cocina, servicios, sanitarios y depósitos, nunca fue terminada y es una demanda de los y las estudiantes comensales hasta el día de hoy.
Karla Torres es integrante de la Comisión Interna del Comedor Universitario Sanjuanino (CICUS) y comenzó a asistir al comedor durante los inicios de su carrera universitaria. Según ella, la problemática comenzó en 2014 cuando inauguraron la obra pero no estaba apta para ser utilizada porque no tenía cocina, ni sillas y estaba planificado servir la comida allí. Dada la situación, el comedor comienza a funcionar en el subsuelo de la Facultad de Exactas, donde permanece hasta hoy.
Karla explicó que la primera medida de fuerza que tomó CICUS fue en 2019 cuando el comedor de Exactas desbordó de comensales: “A 5 años de la inauguración, en 2019 llega un colapso porque llegó mucha gente que empezó a comer afuera. Decidimos como CICUS iniciar una protesta que consistió en sacar las mesas del subsuelo de Exactas y llevarlas al Comedor Juan Gutierrez para comer ahí. Estuvimos varias semanas y dialogamos con las autoridades, se nos prometió que en 3 meses iban a inaugurarlo pero nunca lo hicieron”.
Posteriormente, en el 2020 CICUS retomó el diálogo con autoridades. Según Karla, tuvieron reuniones con Alfredo Daroni Secretario de Bienestar de la UNSJ del momento. “Aprovechamos que no iba a haber mucho movimiento estudiantil por el tema del confinamiento. Nos dijo que faltaban certificar hornos, faltan quemadores que se perdieron, pero que iban a resolverlo”. Expresó la integrante de CICUS.
Actualmente la obra sigue a medio camino. El pasado viernes 22/4, tras reclamos de CICUS, el Comedor Juan Gutierrez abrió sus puertas pero únicamente para que los y las comensales se sienten a almorzar. Los y las estudiantes buscan la comida en el subsuelo de Exactas y atraviesan un largo camino hasta el edificio del comedor para sentarse a comer.
La decisión se tomó porque la situación en el subsuelo de Exactas es crítica: asisten alrededor de 400 comensales y el lugar está habilitado para aproximadamente 70 personas. “En el subsuelo hay dos laboratorios de biología, dos baños y una sala de conferencia. También compartimos el lugar con el buffete de la Facultad. Además se tapan las cañerías y como no hay ventilación suficiente hay olor a cloaca”. Indicó Karla.
Actualmente el edificio del Comedor Juan Gutierrez se encuentra en obra y se está trabajando para su habilitación. Significa una necesidad para los y las estudiantes universitarias que lleva mucho tiempo sin cumplirse.