Contra el genocidio en Gaza, sanjuaninos se suman a las movilizaciones por Palestina
Este martes habrá movilizaciones en el país y el mundo. Los tres argentinos de la flotilla que permanecían detenidos fueron liberados.

El día 7 de octubre se cumplen dos años desde el primer ataque de Hamás a Israel que desató lo que, al día de hoy, se convirtió en un genocidio al pueblo palestino por parte del estado israelí. Mientras se termina de negociar el acuerdo de paz propuesto por Donald Trump y en medio de un alto el fuego, habrá actividades en distintos puntos de Argentina y en otros países.
En San Juan, la convocatoria se realizará este martes 7 de octubre a las 18 en la Plaza 25 de Mayo como una expresión de solidaridad con el pueblo palestino.

Sobre la flotilla Sumud Global que llevaba ayuda humanitaria, el gobierno de Israel deportó a 171 activistas a los que considera “provocadores”, entre ellos a la reconocida militante medioambiental sueca, Greta Thunberg. Entre los activistas también había cuatro argentinos detenidos e incomunicados que fueron liberados recientemente. Se trata de la diputada por la ciudad de Buenos Aires (FIT), Celeste Fierro, el ex legislador por Córdoba, Ezequiel Peressini (Izquierda Socialista) y el militante del movimiento Nuestra Patria de la ciudad de La Plata, Carlos “Cascote” Bértola.

La Flotilla Global Sumud estaba compuesta por más de 40 barcos que transportaban ayuda humanitaria como alimentos, suministros médicos y otros artículos esenciales a Gaza. Los activistas argentinos viajaban junto con cientos de parlamentarios, abogados y activistas de docenas de países.
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Los tripulantes fueron encerrados en el mayor centro de detención y tortura de Israel, la cárcel de Ketziot, ubicada en el desierto del Néguev, recinto que concentra múltiples y graves denuncias por violaciones a los derechos humanos.
De acuerdo a lo descrito por distintos tripulantes, los integrantes de la flotilla pasaron las primeras horas de su detención en régimen de aislamiento, sin acceso a alimentos, bebidas o asesoramiento legal. Recién al tercer día recibieron asistencia consular y el apoyo de abogados de derechos humanos del centro jurídico Adalah, que defiende a palestinos en Israel.
El argentino Nicolas Calabrese, liberado el fin de semana, relató su vivencia en la cárcel israelí: “Fuimos humillados y sufrimos golpes y violencia física. Principalmente la compañera Greta Thunberg, que fue la que más sufrió esta humillación: la separaron de todos los tripulantes, la provocaron y la obligaron a besar la bandera de Israel, poniéndola constantemente encima de ella para humillarla. Estuvimos sin alimentación durante más de veinte horas”.
El argentino radicado en Brasil también denunció que los agentes israelíes se robaron toda la ayuda humanitaria que llevaba la Flotilla y también todas las pertenencias de los tripulantes.
En la estadía en prisión, se hizo presente el criminal y ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, responsable directo del Servicio Penitenciario de Israel (SPI), quien se filmó en varias oportunidades insultando y burlándose de los secuestrados, a quienes se obligó permanecer de rodillas y esposados durante su presencia.
“No puede ser que el Primer Ministro los envíe de vuelta a sus países una y otra vez, y este envío haga que regresen una y otra vez”, expresó el funcionario israelí, presionando a Netanyahu para que se tomen medidas más duras con los activistas.
Según hizo trascender el periodista Gustavo Veiga en Página 12, a los prisioneros se les pidió firmar una declaración para su deportación inmediata, que los obligaba a reconocer haber ingresado ilegalmente al país, a pesar de que fueron detenidos en aguas internacionales y trasladados a territorio israelí por la Armada. Aquellos que firmaron esta condición, incluida Thunberg (quien ya había sido deportada en junio), tendrían prohibido el ingreso a Israel por un lapso de 100 años. Quienes se negaran, podrían enfrentar hasta 72 horas adicionales de detención, según la legislación israelí.