Caso Bloch: ¿Orquesta política?

Con una causa por acoso sexual y laboral archivada, la Universidad Nacional de San Juan es un campo de tensiones. Hay de todo: contexto preelectoral, dimisiones de cargos, intereses marcados, posibilidad de juicios y falta de representatividad política. La posible destitución de un decano, un tema que no se discutía desde la dictadura.

Tadeo Berenguer, Marcelo Lucero y Lucas Molina en exclusiva con La Mecha. Los tres actores componen la triada del desarrollo de esta nota, que intenta rastrear y repasar los hechos públicos que tienen, desde hace tiempo, a Rodolfo Bloch y a la comunidad universitaria toda en vilo. 

Rodolfo Bloche, decano de Exactas denunciado por violencia de género.

A casi un mes de que el Consejo Superior -CS-, de la Universidad Nacional de San Juan – UNSJ-, archivara la denuncia de acoso sexual, psicológico y laboral de una trabajadora nodocente al decano Bloch, repasamos cómo fue el caso, cuáles son las instancias por las que transcurrió la causa, y abrimos un paragua: la política electoral.

Antecedentes

A fines de diciembre del año 2022, la denunciante dio testimonio de que fue acosada sexual y laboralmente. Esta denuncia fue recibida en marzo del 2023 en la Oficina de Género de la UNSJ.

//Leé también: Caso Bloch: el impacto mediático de las denuncias por violencia de género en la UNSJ

Por protocolo, la Oficina de Género procedió de la siguiente manera: elevó la acusación correspondiente y, en este caso, se sumó la recomendación de continuar con el trámite administrativo de la denuncia a Bienestar Universitario. Es allí donde el secretario Lucas Molina dio el ok para iniciar la investigación. Es clave entender que la causa analizada por la Oficina de Género dio curso a posteriori por la Dirección General de Asuntos Legales y, a su vez, por el Área de Sumarios -se encarga de recolectar pruebas-. Ese dictamen de Asuntos Legales se ascendió al Rector. El último paso consistió en que Berenguer, como presidente del Consejo Superior, le hizo llegar al cuerpo de consejeros el expediente. El CS es el decidió.

Tadeo Berenguer junto a Rodolfo Bloch. Otras épocas.

Un dato más, de este caso, es que a pedido de la consejera de Primero Sociales, Cecilia Yornet, la Oficina de Género prestó acompañamiento en las otras dos dependencias durante todo el proceso, aunque eso no está previsto en la normativa.

De yapa: luego de la decisión de archivar la causa Bloch, dos secretarias de Exactas renunciaron a sus respectivos cargos. Hablamos de Alejandra Pittaluga y Jimena Trotteyn, ex secretaria Académica y secretaria de Investigación y Posgrado, en el orden dado. Ambas se expresaron a través de sus redes sociales, sin ahondar demasiado en el tema y no quisieron hablar con este medio. Tampoco lo quiso así Rodolfo Bloch, aunque en un principio se comprometió a dar una entrevista.

Comunicado de Alejandra Pittaluga y Jimena Trotteyn

Lucero, Berenguer y Molina: por partes

Algo que llamó mucho la atención de este caso en particular fue la filtración de datos y, por consiguiente, las reuniones secretas de los consejeros, que tan secretas no eran. Sobre esto, Marcelo Lucero, decano de la Facultad de Sociales y Consejero Superior, manifestó “que las sesiones hayan sido secretas tiene que ver con cumplir la normativa de la confidencialidad de las partes”.

Marcelo Lucero, decano de Sociales

En relación a las filtraciones, añadió: “Tuvimos dos reuniones de Consejo Superior antes de que se haga efectiva la denuncia. Nos pasó en las dos reuniones exactamente lo mismo: llegamos y ya toda la información del día anterior había sido anunciada en los medios con detalles clarísimos de qué se iba a tratar, cómo se iba a tratar, cuáles eran los puntos”. A lo que sumó: “Acá hubo una voluntad de debatir públicamente esto, y no tanto de resolver el problema en el seno del concepto”.

“Estuvimos en silencio 4 días, mientras otros, sin respetar las normas, salieron a difundir todo. Eso nos puso en lugar de debilidad porque después tuvimos que salir a defendernos”.

Acerca de la defensa y sobre el lugar que ocuparon los consejeros de Primero Sociales, Lucero sostuvo que “casi el 90% de los Consejeros Superiores expresó su opinión. Fuimos testigos de un estado de incertidumbre muy, muy claro, que era fruto de las inconsistencias que nosotros veíamos en el expediente. Nosotros leímos las 600 páginas y, además, solicitamos asesoramiento de expertos en, no solamente lo legal, sino también en lo psicológico, y así llegamos a una opinión”.

Recordemos que el voto de los consejeros requerido para llevar a Asamblea Universitaria –máxima autoridad- la posibilidad de desligar del cargo al decano Bloch era sobre dos tercios de los consejeros, es decir, si en el Consejo Superior está constituido por 39 personas, entonces 26 eran las que marcaban esa posible destitución, o no.

Marcelo Lucero y Rodolfo Bloch. Otras épocas.

En ese sentido, los consejeros de Primero Sociales -Marcelo Lucero, Cecilia Yornet y Marcela Saffe– fueron por la abstención, pero presentaron una moción para ampliación de dictamen. A tal efecto, Lucero afirmó: “Solicitamos que la Dirección de Asuntos Legales ampliara su dictamen para que aclarara ciertos puntos, porque la decisión que nosotros tomáramos y le lleváramos a la Asamblea tenía que ser una decisión lo suficientemente contundente para evitar una posterior judicialización, ya que con elementos pocos consistentes podría implicar un efecto “boomerang”. Esto es: un posible juicio contra la Universidad o contra la denunciante”.

Una de las abogadas que asesoró a los consejeros de Primero Sociales argumentó que “la oficina de sumarios concluyó su informe, sosteniendo 4 cargos hacia Bloch: acoso sexual; acoso laboral; coerción y coerción por interpósita persona, y diciendo que hay elementos probatorios para destituirlo, por lo que hace ese pedido al CS. En cambio, la oficina de legales dice que hay una violación al protocolo -sin indicar en qué aspectos-, y agrega que comparte la opinión de la oficina de sumarios, así que pide lo mismo: la destitución de Bloch».

«Por eso, hay un grupo de consejeros que pide una moción de ampliación del dictamen de legales, para aclarar esas diferencias y porque observan problemas en la prueba ofrecida. Esa moción no obtuvo la mayoría suficiente y directamente pasaron a la votación sobre la decisión de legales. Esa tampoco obtiene la mayoría. Como no se logra la mayoría necesaria para ninguna moción, la causa pasa a archivo. Esa decisión del CS deja abierta la posibilidad para que ambas partes, denunciante y denunciado, puedan recurrir a la Justicia, explicó la abogada.

Otra cuestión que se estuvo debatiendo es si los consejeros son responsables legalmente por esta decisión. Según la profesional, “como los dictámenes de legales no son vinculantes, es decir, que el CS no está obligado a decidir conforme lo que legales dice, pueden apartarse. Pero tienen que fundamentar por qué lo hacen”.

En suma, el voto de los consejeros de Primero Sociales se habría dado sobre el procedimiento, no sobre la culpabilidad o inocencia del decano de Exactas.

Para Lucero, se ha cometido uso político electoral de la causa.Creo que, si tres candidatos a rectores salen después de esto a tomar posición pública, es porque se están debatiendo el caso para poder posicionarse y tirar agua para su molino”, señaló.

Consejo Superior de la UNSJ

En el marco de eso, también desgastan a otros referentes políticos. Yo sigo sin entender por qué van a los medios de comunicación y no al CS. Es importante decirlo, la aprobación del acta en el consejo fue por unanimidad. Yo creo que las cosas hay que discutirlas en el consejo antes que nada para preservar la institución y a la persona denunciante”, expresó el decano de Sociales.

Durante la primera votación –para la ampliación del dictamen-, fueron 14 votos a favor, mientras que en la segunda -destitución de Bloch– fueron 13 votos en contra. Ahora, ¿De quién fue ese voto que cambió?

Tadeo Berenguer

El Rector de la Universidad y presidente del Consejo Superior es el que brindó el expediente de la causa –de 600 páginas- a los consejeros y apuntó contra los que se abstuvieron alegando que “pueden considerar que hay incongruencias, pero para eso tuvieron tiempo de evacuar las mismas. No deberían haber esperado a la sesión para manifestar con una abstención. Han tenido tiempo de leer y de asesorarse”.

Tadeo Berenguer, rector de la UNSJ.

Si bien las reuniones fueron secretas y los votos no fueron nominales, la información trascendió. En palabras de Berenguer,la denunciante y el denunciado pidieron votación nominal, y los consejeros se negaron”. ¿Por qué se negaron? “Porque seguramente después vendrían juicios, ya que la parte administrativa queda de lado, y prosigue la parte judicial. Los consejeros no se dieron cuenta que ahora todos somos plausibles de un juicio porque no está identificado quién voto por una postura y quién voto por otra”, señaló.

Para Berenguer las votaciones debieron ser nominales y las reuniones abiertas. “Las votaciones secretas ya no tienen ningún sentido de ser porque, sobre todo en este caso, la causa ya estaba juzgada, ya estaba todo definido, no se estaba revictimizando a la víctima”, aseguró.

Éramos 40 personas las que estábamos bajo sospecha de filtración de información porque todos teníamos nuestros celulares, y antes de terminar cada sesión secreta, los medios están sabiendo los resultados”, agregó.

Consejo Superior de la UNSJ.

Estoy molesto porque al momento de perder la moción que implicaba la ampliación de dictamen y de pasar a un cuarto intermedio, la obligación era votar por una cosa o la otra. No pueden aducir los consejeros, que son la máxima autoridad de esta Universidad, que tienen falta de conocimiento, cuando han tenido la posibilidad de informarse”, sentenció.

¿Por qué cambia el voto del rector de la Universidad? ¿Por qué no hizo uso de la facultad que tiene como presidente del Consejo Superior de vetar el dictamen si estaba en contra del mismo?

Para impedir que este proceso se termine ahí. Voté para que se ampliara el conocimiento, pero yo ya estaba consciente. No es un acto republicano estar vetando determinaciones que toman los cuerpos democráticos constituidos. En nuestro país hubo dos leyes en el Congreso Nacional apoyadas por amplia mayoría y el señor presidente ha tomado la atribución de vetarlas. Me dicen que es una atribución que tiene, sí, yo también, por el artículo 117. Pero de ninguna manera iba a vetar una decisión porque no ha sido una decisión, sino un proceso administrativo que no alcanzó votos y nos llevó a otra cosa«, sostuvo Berenguer.

“Ya no hablo con Bloch”, dijo Tadeo Berenguer.

Como rector de la Universidad, es casi imposible no mantener un vínculo con los decanos de las facultades, por cuestiones políticas, de funcionamiento, de distribución de presupuesto, entre otras. “Hoy, no tengo vínculo con el decano de la Facultad de Exactas”, pronunció Tadeo.

¿Orquesta política?

Hay un discurso bastante instalado dentro de los pasillos de la Universidad toda, que asegura que la denuncia por acoso laboral y sexual habría sido utilizada para valerse de una disputa entre Bloch y Lucas Molina (actual secretario de Bienestar Universitario y referente del Frente Patria Grande San Juan). “Sí. Otros dicen que he sido yo el que ha orquestado esto a través del brazo de Molina, de ninguna manera”, finalizó el rector Tadeo Berenguer.

Lucas Molina

El alegato de la existencia de un conflicto entre el decano de Exactas y el secretario de Bienestar Universitario, fue confirmado por el mismo Lucas Molina. “En ese momento, Bloch ya era un árbol caído y no quisimos hacer leña. Entendimos que no tenía más proyección política, solamente había que esperar que le llegue el momento de su jubilación”, aseveró.

Lucas Molina, secretario de Bienestar de la UNSJ

La disputa ocurrió en el marco de un acuerdo táctico entre Creando (agrupación estudiantil, que ahora integra al Frente Patria Grande en San Juan) con el espacio de Bloch en Exactas. Alianza que hacía mella en la candidatura de Mónica Coca, allá por el 2020, previo a su fallecimiento. “Bloch no escuchó lo que nosotros teníamos para decir en cuánto a qué facultad queríamos. Eso hizo que tuviéremos una discusión, que quedó ahí. Para nosotros no es un enemigo. No lo íbamos a enfrentar electoralmente”, sostuvo Molina.

Al cabo de dos años, durante el 2022 hubo un enfrentamiento explícito entre la organización de Eduardo Camus –referente de Patria Grande en San Juan– y el decano Bloch por las elecciones del gremio de los nodocentes universitarios, APUNSJ. El referente de Patria Grande habría hablado abiertamente a sus militantes sobre la «traición» del titular de la unidad académica e incluso habría dicho que «no cumplió con su palabra», en referencia a un acuerdo que se cerró tras la victoria de Tadeo Berenguer en el Rectorado. Sin embargo, al ser consultado por este medio, Camus lo negó y le bajó el precio a la pulseada: «Lo hubiese hecho de otra manera«.

¿Qué acordeón toca Molina en la investigación?

La Oficina de Género, que recepcionó la denuncia y recomendó la continuidad de la investigación por el caso de acoso laboral y sexual, depende directamente de la Secretaría de Bienestar Universitario. Es el mismo Lucas Molina quien debe dictaminar si se da seguimiento o no a cada causa. “Yo tengo que opinar en eso, si le damos o no continuidad. Si yo dijera “esto no”, entonces queda ahí. En el 100% de los casos recibidos, yo he opinado lo mismo que la Oficina de Género. Entiendo que no estoy lo suficientemente formado en género, y que ellas son las especialistas”, argumentó.

Rodolfo BLoch al micrófono, Lucas Molina sentado a su lado. Otras épocas.

Luego de que Bienestar diera el sí, la investigación pasó al presidente del CS, Tadeo Berenguer, y sucede todo lo que se ha mencionado con anterioridad.

Para Molina, Bloch tiene bastantes críticas por su gestión, pero, al margen de eso, pronunció: “Rodolfo Bloch es una autoridad elegida democráticamente, es la máxima autoridad de una Facultad. Él representa la utilización del poder para saciar el ego”, a lo que sumó “no es chiste hacer operaciones políticas con este tipo de cosas, no es correcto”.

Molina tuvo en sus manos el expediente inicial, sin embargo, no habría tenido acceso al expediente final con dictamen, pruebas, y demás. Desde ese punto, declaró: “Creo que la investigación fue exhaustiva, y que, si hubo puntos de dudas, que seguramente los hubo, y es legítimo, porque es una causa muy compleja, esos puntos se deberían haber podido resolver a tiempo”.

También comentó que “el decano Bloch pidió que no esté presente en las reuniones de consejo ni la directora ni la responsable de la Oficina de Género, ni el director general de Asuntos Legales, ni la instructora sumariante en la sesión. Nada más ni nada menos que las tres personas que podrían haber salvado las dudas que se presentaron en la sesión”.

En relación a la abstención de los votantes, para el Secretario se trató de deslegitimar la causa desde el primer momento la investigación, y la votación del CS fue una cosa más, una consecuencia de la deslegitimación sistemática que se entabló del primer momento con la nota que se subió a la página de la Universidad que dejaba a Bloch como una persona `integra y políticamente potente´. Esto sumado a la deslegitimación que le dieron a la denunciada y las llamadas/reuniones que mantuvieron algunos consejeros con el denunciado”, afirmó.  

Yo entiendo a los consejeros que se abstuvieron. No comparto, pero lo entiendo. No creo que sean uno traidores a la Universidad. A mí me parece que el responsable en todo esto es una sola persona: Rodolfo Bloch”, finalizó Molina.

Scroll to top
Close